Las intensas lluvias continúan causando estragos en todo el país, con inundaciones en ciudades clave y un devastador aluvión en la provincia de El Oro
El invierno no cede y continúa golpeando con fuerza a todo el territorio ecuatoriano, dejando a su paso inundaciones y severos daños materiales. Las intensas lluvias han provocado el desbordamiento de ríos y el colapso de infraestructuras en diversas ciudades, generando una situación de emergencia que demanda atención urgente.
Babahoyo, Machala, Portoviejo y Guayaquil se encuentran entre las localidades más afectadas, donde las inundaciones han sumergido calles y viviendas, obligando a cientos de familias a evacuar. La fuerza del agua ha causado estragos en el mobiliario urbano y ha interrumpido el tránsito vehicular, generando caos y dificultades en la movilidad.
La última emergencia se registró en el cantón Viñas, provincia de El Oro, donde el desbordamiento de ríos desencadenó un aluvión que arrasó con las principales calles de la localidad. La fuerza del agua arrastró consigo viviendas, vehículos y otros bienes materiales, dejando un panorama desolador y a numerosas familias damnificadas.
Ante la magnitud de la tragedia, el presidente Daniel Noboa ha dispuesto la inmediata asistencia a los damnificados. Se han desplegado equipos de emergencia para brindar ayuda humanitaria, evacuar a las personas en riesgo y evaluar los daños. El gobierno ha anunciado la implementación de medidas para mitigar los efectos del invierno y reconstruir las zonas afectadas.
Las autoridades hacen un llamado a la solidaridad de la población para colaborar con los damnificados, donando alimentos no perecederos, agua potable, ropa y otros artículos de primera necesidad. La Cruz Roja y otras organizaciones humanitarias se encuentran coordinando la recepción y distribución de donaciones.