En medio de la rosca previa al cierre de listas nacionales del próximo 17 de agosto, Sergio Massa definió no competir en octubre y se pone al hombro el armado de un frente anti Milei. El ex ministro de Economía busca ceder lugar a nuevas generaciones y fortalecer la unidad interna del peronismo, dejando atrás las tensiones recientes.
La decisión de Massa llega tras semanas de especulaciones y un operativo clamor que había sido impulsado por intendentes y referentes del Frente Renovador como Cecilia Moreau y Rubén Eslaiman. Sin embargo, en su entorno afirman que «Sergio no está en la discusión de cargos, está para ayudar», según declaraciones a C5N.
Massa entiende que su aporte es más valioso fuera de las listas y desde espacios como la Fundación Encuentro, donde viene trabajando propuestas ligadas a la seguridad, la situación de los jubilados y la defensa de la clase media, duramente golpeada por las políticas de Milei.
El anuncio se da en el marco de la interna con Juan Grabois, líder de Patria Grande, y luego de un tenso cierre de listas en la provincia de Buenos Aires, donde incluso circularon listas paralelas. Finalmente, la unidad se impuso y, según el massismo, el mismo esquema de acuerdos y porcentajes se mantendrá para octubre.
Desde Fuerza Patria y el Frente Renovador reivindican que el entendimiento bonaerense servirá de base para el armado nacional, apuntando a una estrategia común para enfrentar al oficialismo libertario.