Miles de visitantes colmaron la villa cordobesa tras una intensa nevada que convirtió el paisaje en una postal invernal. El flujo vehicular colapsó los accesos y obligó a implementar controles para evitar accidentes.
La Cumbrecita vivió este domingo una jornada de esplendor blanco que atrajo a miles de turistas en busca de nieve y postales serranas. Desde primeras horas de la tarde, el ingreso de vehículos fue constante y masivo, generando una saturación de caminos que empeoró al caer la noche.
El hielo acumulado transformó el regreso en un verdadero desafío: demoras prolongadas y condiciones peligrosas pusieron en alerta a las autoridades. Para ordenar el caos, Defensa Civil activó dos controles preventivos clave. El primero, en Los Reartes, impidió el ascenso ante la imposibilidad de circular con seguridad. El segundo, en Capilla Vieja, con colaboración de agentes de Villa General Belgrano, reguló la circulación descendente.
Desde el organismo insistieron en extremar la precaución: “La nieve es atractiva, pero exige responsabilidad. Recomendamos evitar viajes nocturnos y consultar el estado de los caminos antes de emprender el ascenso”, advirtieron. También alertaron sobre posibles cortes preventivos durante las próximas 48 horas si continúan las bajas temperaturas.
El episodio confirmó el creciente atractivo de La Cumbrecita como punto clave del turismo invernal en Córdoba, aunque también evidenció la necesidad de una mejor planificación frente a eventos meteorológicos extremos.