Argentina adopta prácticas inspiradas en el “Plan Cero Ocio” de El Salvador, destacando el modelo salvadoreño como un referente regional en rehabilitación y productividad penitenciaria.
En Argentina, los privados de libertad han comenzado a confeccionar uniformes para el Servicio Penitenciario Federal como parte de un nuevo proyecto que busca combatir el ocio y fomentar la rehabilitación. La ministra de Seguridad Nacional de Argentina, Patricia Bulchich, compartió un video sobre esta iniciativa, generando comparaciones con el exitoso “Plan Cero Ocio” implementado en El Salvador.
El “Plan Cero Ocio”, conocido inicialmente como “Yo Cambio” y nacido en el Centro Penitenciario de Apanteos, Santa Ana, en 2011, ha sido un modelo a seguir por sus significativos avances en la gestión penitenciaria.
Este plan introdujo talleres, actividades como la siembra de hortalizas y oportunidades deportivas, que transformaron los conflictos en las cárceles en espacios de formación y productividad. Gracias a estas iniciativas, unos 30,000 reclusos salvadoreños, de un total de más de 120,000, participan activamente en programas que han llegado a representar a El Salvador en competencias internacionales.
Aunque los sistemas penitenciarios enfrentan desafíos en toda la región, el impacto del enfoque rehabilitador salvadoreño resalta como un ejemplo positivo. Incluso instalaciones de máxima seguridad, como el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), que alberga a 12,500 reos de alta peligrosidad, han adoptado estrategias para transformar la realidad penitenciaria.
El reciente proyecto argentino reafirma la influencia del modelo salvadoreño como un referente para América Latina en el camino hacia sistemas penitenciarios más humanos y efectivos.